Mafrase inició su actividad en 2013, y desde entonces hemos hecho un esfuerzo para impulsar nuestro crecimiento en diversas áreas, privilegiando el espíritu de asociación en las relaciones con nuestros clientes, ya que creemos que "dar, es sinónimo de recibir" y que "el intercambio de conocimiento es un pilar de crecimiento de cualquier negocio".
Nuestra conducta se rige por una postura basada en la ética y en la profesionalidad, y utilizamos una red propia de empleados –con competencias técnicas necesarias– para llevar a buen puerto los objetivos que asumimos ante nuestros clientes.
Nuestro objetivo primordial es responder a las necesidades y expectativas de nuestros clientes, ofreciendo respuestas que permitan la valorización real del capital humano, contribuyendo así al aumento de la empleabilidad y de la competitividad.
Mafrase, al reunir un capital único que permite integración y suministro de soluciones globales y creativas, apuesta fuertemente por la calidad de sus empleados, pues queremos ser cada vez más conocidos –y también reconocidos– por la calidad de nuestros servicios, por la diversidad de oferta de algunos servicios innovadores, así como por un reducido tiempo de respuesta a las solicitudes de nuestros clientes.
Estamos aquí para establecer una relación duradera, basada en el conocimiento y en la responsabilidad, para que nuestros socios encuentren siempre motivos para estar con nosotros.